domingo, 19 de mayo de 2013

Mayo

Ni todo en este viaje son victorias
ni las derrotas suman cero,
las resistencias son enseñanzas,
las luchas experiencia y
las derrotas y errores
son los libros que nos regala la calle,
y ni el fin justifica los medios
pero si he acabado conduciendo a tu lado
bendigo todos los tropiezos en el camino.

Mayo aparece serpenteante en el calendario,
un agua que parece traída de atrás,
continúan los palos en las calles,
mi expresión seria leyendo el diario,
sigue en obras la revolución de primavera
mientras escavadoras y perros del capital
tiran abajo los pasos de la historia,
de ancestros, abuelos, padres y madres,
de todos aquellos que vieron en la utopía
la forma de vida no quimérica.

Sigue el silencio a vacío tras los llantos
del desalojo en otra casa,
el ambiente apesta a expediente de regulación,
a la cabeza baja en la cola del paro,
las ofertas que no llegan,
maletines invisibles que encomiendan su alma
al Dios ausente de los mercados;
y arde Palestina en la indeterminación,
en el pasotismo internacional de quien es opresor,
mientras otra mano tiembla en la puerta del súper
pide ayuda, clemencia y salvación
quizás solo hasta mañana.

Pero los balcones se tiñen de florido tricolor,
nuestras carreras levantan adoquines,
y aunque seguimos sin descubrir la arena de playa
y sin convertir los muros en chocolate,
la sonrisa muestra símbolos de futuras victorias,
somos más y más fuertes,
se debilita el poder bajo nuestra voz,
su yugo duele pero no ahoga,
y tú me miras y me besas,
dejamos de soñar para cambiar la realidad,
el miedo cambió de bando.